Arrow 4x03 - "Restoration"

¡Buenas! Lo sé, soy lo peor. La semana pasada no pude hacer la review de Arrow por falta de tiempo, pero al menos sí tenéis la de esta semana *introducir aplausos*

Creo que seguiré la dinámica que he estado llevando con las dos últimas reviews de Agents of Shield, para quienes no las hayáis leído os diré que en lugar de ir minuto a minuto como he ido haciendo desde que comencé el blog lo haré mejor por tramas. Eso sí, a no ser que me digáis que preferís de la otra forma, claro.

¡SPOILERS! SPOILERS EVERWHERE!

En este capítulo hemos tenido dos tramas y media, la del Team Original contra el nuevo malo contratado por Damian, la de Thea y Laurel yendo a Nanda Parbat a resucitar a Sara y la que es media trama - o al menos yo lo considero así - aunque está englobada en la primera es Diggle y su continuo enfado con Oliver.

El capítulo comienza como antaño, Oliver y Diggle persiguiendo a los Fantasmas mientras Felicity les guía desde la Arrow Cueva 2.0. Me sigue parecido más que absurdo el casco tan espantoso que le han puesto a Diggle. Para eso que le pongan un casco de moto y ya está porque vamos...

Uno de los malos acaba escapándose pero, ¿quién está ahí para salvar la situación? Pues Felicity, que dios sabe cómo se pone a manejar una de las excavadoras que hay por ahí y consigue encerrar a uno de los malos.

Cuando Diggle llega el otro intenta suicidarse al más puro estilo de los Nazis con un diente con cianuro, pero Diggle está rápido y consigue arrebatárselo, aunque no lo bastante porque el tío este le atiza con una pistola eléctrica. Que por cierto, a mí que me expliquen cómo es posible que antes uno de los Fantasmas no le haya disparado teniéndolo a huevo...

La parte buena es que al menos tienen una pista, aunque eso sea un diente del que quieren sacar el ADN. Como la cosa esta va a tardar Felicity propone irse a tomar unos margaritas pero como Diggle sigue en modo “me enfado y no respiro” declina la oferta, cosa que empieza a exasperar a Oliver que ya no sabe qué más puede hacer para recuperar la confianza de John.

Mientras tanto, cuando Diggle vuelve a su casa se encuentra con un invitado no esperado, uno de los de ARGUS que Lyla le había pedido ayuda con el tema del hermano de John y HIVE. La verdad es que por fin tenemos otra pista, y es que quién mandó matar al hermano fue una tal Fayad. Sinceramente me sorprendió que fuese una mujer, no por nada concreto, pero me sorprendió.

Casualmente, esta tal Fayad está ahora en Star City porque los altos directivos – llamémosles así – se están empezando a impacientar con la lentitud y pocos resultados que está dando Damian así que han decidido enviar a esta mujer junto con un pequeño regalito, un nuevo asesino. La verdad es que he de reconocer que este nuevo personaje mola, eso de matar con cartas de póker que aparecen mágicamente de sus tatuajes mola bastante.

Por fin descubren qué pasa con ese diente del Fantasma o más bien no lo descubren, porque no tienen ni idea de qué significa eso de que “tiene menos marcadores genéticos de los que debería”. A mí que no me dejen con esa duda, ¿eh?

Entre tanto tienen un aviso de que se está produciendo un robo y Oliver decide encargarse él mientras Felicity avisa a Diggle, peeeeero John tiene otros planes y es que ha descubierto la ubicación de Fayad y está tanteando el terreno a ver que se encuentra. Aunque claro, las cosas nunca, NUNCA salen como uno planea y es que antes de tiempo le descubren, haciendo que su objetivo – Fayad – desaparezca.

Y en lo que esto ocurre y Oliver ha llegado al lugar del robo pero, como bien diría Sheldon “¡ES UNA TRAMPA!”, puesto que Míster Tatuajes le estaba esperando. Yo de verdad que me quedo más que asombrada y sí, a estas alturas, del manejo que tiene Oliver con el arco. ¡Qué manera de desviar cartas!

El caso es que, como no podía ser de otra manera, Oliver acaba llevándose puesta una de esas cartas porque no iba a ser todo tan perfecto. Felicity les cuenta a Queen y Diggle que quien ha atacado a Green Arrow es un metahumano y aquí es cuando viene una de las cosas más épicas que Felicity ha hecho nunca… Poner en su sitio a John y Oliver.

Está claro que las cosas se están empezando a salir de madre y que como sigan así alguno de los dos va a acabar herido y de gravedad, porque – al menos Diggle – no confían el uno en el otro y ya es hora de que al menos se siente y hablen las cosas como dos adultos que se supone que son.

Yo de verdad entiendo que Diggle siga enfadado por lo que Oliver hizo hace meses pero he ahí la cosa, han pasado meses, él se ha disculpado y hasta Lyla entiende el porqué de lo que hizo, ¿por qué no puede hacerlo también Diggle? Todos somos conscientes de que usar a Lyla fue un golpe muy pero que muy bajo y el confiar en Malcom antes que en Diggle también, pero creo que ya sabemos todos las razones y, aunque no lo compartamos debemos entender que ya ha pasado y que Oliver lo siente. ¿De verdad es necesario seguir castigándole de esa manera? Y más cuando encima los dos han estado a punto de morir por haberse creído lo suficientemente capaces como para encargarse ellos solos sin necesidad de apoyo.

Tiene toda la razón del mundo.

Al menos hemos sacado un cosa buena de esta charla y es que parece ser que al final Diggle le va a dar una oportunidad a Oliver para recuperar su confianza, lo que nos lleva a que Queen le cuente lo de Fayad y que éste a su vez le termine revelando que su hermano fue asesinado por orden de HIVE, más concretamente por Fayad.

Lo que sigo sin comprender es cómo es posible que Diggle, en dos años, no le haya contado nada de lo que sabía sobre la muerte de su hermano. Quizá es porque, al igual que Oliver no cuenta casi nada de esos cinco años que estuvo desaparecido, a él no le daba la gana de revelar algo así. No lo sé, son conjeturas mías.

Mientras tanto Felicity vuelve a Palmer Tech para darle a uno de sus empleados – dios, soy pésima para los nombres – la carta procedente de los tatuajes del Metahumano. Yo no sé a vosotros, pero toda esta escena me recordó muchísimo a cuando Felicity aún no era del Team Arrow y Oliver siempre acudía a ella con excusas absurdas para que le echase una mano.

Como era lógico, al final meten a Felicity en el ajo para que les eche una mano para encontrar a Fayad y claro, también regaña a Diggle por haber mantenido todo eso en secreto.

La búsqueda de Felicity ha dado sus frutos pero no los que Diggle esperaba, y es que encontrar encuentran a Fayad, pero con un la garganta cortada y una carta en la boca. Ains pobre John, su gozo en un pozo. Para una pista que tenía…

Curtis también ha descubierto nuevas cosas sobre la carta, de las cuales no me llegué a enterar de nada salvo algo de que tienen una red neurológica o algo así, pero de lo que sí me enteré es de que es posible, gracias a esa carta, rastrear y encontrar al dueño peeeero que el dueño, al poseer toda la “bajara” por así decirlo puede encontrarles a ellos antes por lo que ¡sorpresa!

Y por fin me resuelven la duda que tenía y era la ubicación de la Arrow Cueva 2.0, y es que está bajo Palmer Tech, lo cual me lleva a preguntar, en la ausencia de Felicity y Oliver ¿cómo diantres tuvieron acceso a ese lugar Diggle, Thea y Laurel?

Eso y, ¿cómo ha entrado el tío de las cartas? Porque sabemos que una de las entradas es el ascensor pero si nosotros no sabemos cuál es la otra, ¿cómo es que él sí?

Tras la escena de Felicity con la metralleta destrozándolo todo a diestro y siniestro EXIJO que Oliver le de unas lecciones de lucha o algo de eso, porque verla en modo badass mola demasiado.

Y también os digo, creo que a estas alturas Oliver debería de dejar de sorprenderse por las habilidades ocultas de Felicity, porque no es la primera vez que hace algo así, recordemos el momento en el que atacaron a Lyla y ella echó una mano.

Míster Tatuajes iba a dejar la ciudad para no volver pero claro, Diggle tiene demasiadas preguntas sobre HIVE y no iban a dejar que se fuese tan rápido. El problema es que el Señor Cartas no tiene mucha idea porque él simplemente es un peón, así que es otro callejón sin salida. Aunque eso sí, no ha sido una total pérdida de tiempo porque como último recurso éste lanza una de sus cartas mortales hacia Diggle pero Oliver se pone delante, ¿resultado? Pues que ahora parece ser que, por haber recibido una “bala” en su lugar, John le va a dar otra oportunidad a Oliver. ¡Ya era hora!

Al final Oliver, Diggle y Felicity sí se van a tomar esa copa de la que hablaban al inicio del capítulo. Dios, mirad que me gusta el equipo de ahora, pero es que el Original Team Arrow me puede. Y parece ser que por fin también vamos a descubrir pronto – imagino que en el próximo episodio – la Arrow Cueva 3.0, porque evidentemente donde están ahora no están a salvo de Damian. Tengo ganas de saber dónde leches van a ubicarlo esta vez.

Parece ser que Curtis puede ser un pseudo miembro del Team Arrow puesto que ya sabe que su jefa está ayudando a Green Arrow.

Y una cosita que no he comentado pero a la que llevan haciendo referencia todo el capítulo, el móvil de Felicity. Lleva haciendo cosas raras hasta que al final del capítulo se puede ver en la pantalla “Felicity”. Al principio mi mente ha ido al padre de ésta, pero luego una amiga nos dijo que ella había pensado más bien en Ray, y creo que está en lo cierto. ¿Será que Palmer está intentando pedirle ayuda?

Y ahora pasemos a la otra trama que ha tenido este capítulo que no ha sido otra que el viaje de Thea y Laurel a Nanda Parbat para resucitar a Sara. Antes de nada decir que esto me parece la mayor gilipollez y tontería que ha hecho Laurel en muuuucho tiempo. Y ya sabéis que le estaba cogiendo cariño al personaje y todo, pero este gesto me ha parecido de lo más egoísta.

Digo yo que a los guionistas se les podría haber ocurrido otra manera de traer a la vida a Sara sin tener que usar a Laurel, ¿no? Porque con esto sólo hacen que vuelva a ser el personaje egoísta que todos creíamos que había dejado de ser.

Es que, ¿a quién se le ocurre querer revivir a su hermana sabiendo que esas aguas tienen unos efectos secundarios de la leche? ¿Es que no ha aprendido después de ver lo preocupado que está Oliver por Thea? Y es que encima no es que Sara lleve muerta unas cuantas horas, sino que ya son meses. Vamos, es que a mí ni se me hubiese pasado por la mente intentar semejante atrocidad.

Además, no será porque el propio Malcom y Nyssa le han dicho que no lo haga, que no saben qué puede salir de ahí… Pues nada, Laurel sigue ahí empeñada. Mientras la mayor de los Lance sigue intentando jugar a ser Dios, Thea quiere saber si hay alguna especie de cura con la que pueda recuperarse de los efectos secundarios del Pozo Lázarus.

La verdad es que en un inicio creí a Malcom cuando le dijo que había un sabio que quizá podía ayudar, porque si no la otra parte sería tener que apaciguar su sed de sangre matando gente de vez en cuando, pero lo que nunca me imaginé – aunque tampoco me sorprendió – fue que mandase a un par de sus hombres para que atacasen a Thea y que ésta acabase matándoles. Vamos, es el padre del año…

Pero no contento con eso, Malcom al final accede a intentar resucitar a Sara, pese a que Thea ha dicho que no iba a dejar que lo mismo que le está ocurriendo a ella le pase a la menor de los Lance. Y es aquí cuando no vuelvo a entender a Laurel. Es consciente del sufrimiento de Thea ¿y de verdad va a dejar que su hermana pase por lo mismo? Por mucho que diga Malcom que con eso ayudaría también a Thea, aunque tampoco entendí muy bien a qué se refería y si, como siempre, estaba diciendo la verdad.

Al final llevan a cabo la ceremonia de resurrección y volvemos a ver cómo alguien, en este caso Sara, sale de la fosa cual niña del Exorcista. Mal rollo, muy mal rollo. Laurel se cree que ahora que su hermana vuelve a respirar es la misma de antes pero no, al menos de momento es como quien pretende domesticar un animal salvaje.

Y entre tanto Nyssa, que está hasta las narices de esa Fosa, decide cargárselas, dejando a Malcom sin su fuente de la eterna juventud. Aaaaains qué lástima… *nótese la ironía*.

Y hasta aquí la review de este capítulo. ¿Qué os ha parecido a vosotros? ¿Creéis que Laurel ha hecho bien al resucitar a Sara?

¡Hasta la próxima entrada!